Ya sé que ha pasado San Valentín.... seguramente para algunos con “pena” y para otros con “gloria”.
Nosotros la verdad es que nunca lo hemos celebrado, lo que pasa es que últimamente estoy un poco “pastelera”, aunque tengo que decir que en mi caso más bien es con “pena” que con “gloria”...
Las magdalenas no me suben, las tartas si me suben se me queman por debajo y si no se me queman por debajo no me suben y se quedan crudas aaaaahhhhhhhgggggg!
Pero no pasa nada, soy aragonesa de pura cepa y como tal soy TOZUDA, TOZUDA, con lo que no pienso parar de intentarlo hasta que me salga la repostería fina fina.... je je.
De momento os dejo con este postrecillo que me saqué ayer de la manga.
Un amor de postre para un amor de carne y hueso.
Este postrecillo lo hice expresamente para mi amor, por aguantarme y por quererme a pesar de mis insoportables rarezas...
Se trata de un bizcocho de chocolate (la forma de corazón ha quedado un poco churrutera todo hay que decirlo) con salsa de chocolate, bombones de chocolate (es que es para no engordar.... je je) y una copita de Pedro Ximenez.
Los bombones os los pondré mañana.
De momento os dejo el bizcochito.
BIZCOCHO DE CHOCOLATE
Ingredientes:
- 1 yogur natural.
- 1 medida de yogur de aceite.
- 2 medidas de yogur de azucar.
- 3 medidas de yogur de harina.
- 1 sobre de levadura.
- 3 huevos.
- Chocolate de cobertura.
- Mantequilla.
- Almendras a trocitos.
Elaboración:
En una taza fundimos el chocolate y la mantequilla en el microondas.
En un bol ponemos el yogur, el aceite, el azucar, la harina, la levadura y los huevos y los batimos bien hasta que quede una cremita.
En una sartén, tostamos las almendras e incorporamos a la crema.
Después echaremos despacito el chocolate a la mezcla.
Ponemos en un molde para tartas y lo metemos al horno unos 45 minutos.
Una vez frío ya está listo para comer.
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