A LA RICA PARRILLADA

Como ya os he comentado este fin de semana estuvimos en el Pirineo.
Allí tuvimos la gran suerte de que la casa rural donde nos alojábamos contaba con una gran chimenea en el medio de la estancia, donde podíamos hacer brasas.


Así que como somos gente debil, no tuvimos ninguna duda de que esa noche íbamos a comer una deliciosa parrillada de carne.


Como estamos en Aragón compramos ternasco, que no es más que el cordero pero muy pequeñito.
Si lo piensas da un poco de pena, pero está tan rico.....
Normalmente siempre ponemos la mitad de chuletitas de pierna y la otra mitad de costillicas.


Como somos gente de “morrito fino” y de buen comer, también se nos antojó comprar unos chuletones de vaca, que son deliciosos a la brasa.


Teníamos una chistorra, así que decidimos asarla también.
Si no la hubiéramos tenido, seguramente habríamos comprado chorizo y longaniza de Graus, ya que estábamos muy cerquita de esta localidad, y que además es muy típica en mi tierra.
Para acompañar todo esto nos compramos una hogaza de pan de pueblo que también hicimos a la brasa y que quedó estupenda untadilla con un rico majadito de aceite, vinagre, sal, ajo y perejil.



PARRILLADA DE CARNE

Ingredientes:
- Chuletas y costillicas de ternasco (cordero)
- Chuletones de vaca
- Chistorra
- Sal, ajo, perejil, vinagre y aceite.
- Tomillo del campo.
- Pan de hogaza


Elaboración:
Cuando el fuego se ha convertido en brasas y tenemos ya la parrilla quemada hechamos tomillo sobre él para que se queme y la carne tenga aroma.
En la brasa colocamos las costillicas y las chuletas con sal y las dejamos hasta que se hagan según el gusto de cada cual. A mí personalmente el ternasco me gusta más bien “churruscadito”.
Cuando ya hemos hecho el ternasco, colocamos en la parrilla los chuletones de vaca y la chistorra.
Con el chuletón en cambio me ocurre lo contrario, me gusta más bien al punto por lo que le damos una vuelta y vuelta a la parrilla y ya está.
Una vez que ya tenemos la carne, colocamos el pan partido en rodajas en la parrilla y lo tostamos.
En un almidez chafamos unos ajos con sal y perejil, unas gotitas de vinagre y aceite de oliva. Lo majamos bien majadito y acompañamos con él la carne y el pan... y ala! a chuparse los dedillos bien a gusto.